La Fundació ENT, junto con el resto de organizaciones de conservación asistimos a la reunión convocada por la Secretaría General de Pesca donde se discutieron las medidas de urgencia encaminadas a acabar con la grave situación de sobrepesca que sufren los caladeros del Mediterráneo. El 93% de los recursos marinos de este mar están sobreexplotados a niveles que no son sostenibles, poniendo en riesgo el futuro de las pesquerías y, en consecuencia, del propio sector pesquero.
Ecologistas en Acción, Fundació ENT, Greenpeace, Oceana, SEO/BirdLife y WWF hemos presentado un documento común con medidas concretas para recuperar los recursos pesqueros antes de 2020, fecha máxima de obligado complimiento marcada por la actual Política Pesquera Común de la Unión Europea.
De manera resumida, estas son las principales propuestas presentadas:
1. Establecer un calendario concreto para la recuperación de todas las pesquerías del Mediterráneo español antes de 2020.
2. Elaborar planes plurianuales que garanticen la sostenibilidad de los recursos pesqueros, tengan en cuenta al ecosistema marino en su conjunto (principio ecosistémico) e impliquen a todos los actores interesados.
3. Incorporar la pesca de artes menores en la gobernanza pesquera.
4. Aumentar la investigación y la recolección de datos para mejorar la gestión pesquera.
5. Incrementar las medidas de control y vigilancia para que se asegure el cumplimiento de la normativa y la lucha eficaz contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR).
6. Aumentar el control, seguimiento y gestión de la pesca recreativa.
7. Establecer tallas mínimas de referencia para la conservación (MCRS) en función de la talla de madurez reproductora de las especies.
8. Mejorar la trazabilidad y asegurar el cumplimiento legislativo del etiquetado de los productos pesqueros.
9. Establecer medidas para acabar con las capturas no deseadas y descartadas, mediante la mejora de la selectividad de las artes y dando acceso preferencial a los caladeros a aquellas modalidades más selectivas.
10. Incrementar la superficie marina protegida para asegurar la conservación y la recuperación de las poblaciones pesqueras y especies amenazadas, protegiendo a reproductores, juveniles y hábitats sensibles.